En la actualidad, numerosas empresas poseen una infraestructura de voz y datos disgregada; según las diferentes aplicaciones y entornos, dependiendo de las modificaciones y ampliaciones que se ido realizando. Por ello, es posible que coexistan multitud de hilos, cada uno para su aplicación; y algunos en desuso después de algunas reformas. Esto pone a los responsables de mantenimiento en serios apuros cada vez que se quiere ampliar las líneas o es necesario su reparación o revisión, además de entrañar peligro de interferencias, saturaciones, difícil accesibilidad, averías, daños y accidentes.